Los arquitectos Manuel Vicente y João Santa Rita son los artífices de la renovación de la Casa dos Bicos de Lisboa, una residencia del siglo XVI construida como residencia del virrey de la India, transformándola en la sede de la fundación José Saramago, fallecido premio Nobel portugués fallecido en 2010.
Pronto se descubrió que el edificio escondía un pasado mucho más rico de lo que nadie imaginaba. Durante la remodelación se descubrieron restos arqueológicos que datan de los romanos y moros, y tramos de murallas medievales. Conservar estas ruinas, por tanto, se convirtió en uno de los objetivos de la renovación.
Una vez protegidos estos elementos arqueológicos, la atención se centró en el espacio que alberga el legado de Saramago. Ubicado en cuatro niveles, el primer piso es un espacio expositivo, con paredes cubiertas con las portadas de las novelas en sus diversas traducciones, y vitrinas que contienen sus manuscritos. En el segundo piso están las oficinas administrativas, que tienen vista al exterior, sobre el olivo bajo el cual están enterradas las cenizas de Saramago. El tercer piso alberga la biblioteca, y en el cuarto piso, un auditorio para proyecciones de películas y presentaciones de libros.
Foto: David Pereira.